Queríamos compartiros un pedacito de la magia del voluntariado. Magia que vivimos en el Encuentro de Voluntariado en Logroño hace unas semanas. Fue algo más que especial.

Imaginad esto: 100 personas, muchas (65%) jóvenes, la mayoría mujeres, de varios rincones de España (Baleares, Cantabria, Cataluña, Canarias, Andalucía, Valencia, Extremadura, Madrid y La Rioja), unidas con un propósito común: construir ciudadanía. Fue como un miniuniverso donde las personas conectaron a través de sus experiencias y sus ganas de generar nuevas ideas.

Hablamos sobre algo que nos toca muy de cerca: el sistema de derechos en torno a los cuidados. ¡Y vaya si tuvimos un buen respaldo! Personas increíbles de organizaciones locales, académicas y activistas de primera línea en la lucha por el derecho a los cuidados. Fue una pasada, ojalá lo hubierais podido disfrutar más compañeras.

La magia del voluntariado

Fue inspirador cómo nos unimos para enfrentar desafíos reales, cómo compartimos nuestras visiones para un mundo mejor y cómo, juntas, construimos propuestas, llenas de corazón, dirigidas a la ciudadanía. Hubo risas, abrazos, diversidad de voces y una energía que se sentía en el aire. Tanta que nos dio para crear este manifiesto.

Nos reconocemos diferentes, pero no queremos ser desiguales. Sabemos que no todas partimos del mismo lugar ni tenemos las mismas oportunidades para cuidar y cuidarnos. Es por ello que reivindicamos el reconocimiento y el acceso a derechos vinculados a los cuidados para todas las personas en igualdad de oportunidades. Además de reclamar que el acceso a derechos no se trata de un privilegio, sino de un derecho.