El 24 de junio, las fuerzas de seguridad españolas y marroquíes hacían un uso indiscriminado de la violencia hacia las personas migrantes, durante su intento de acceso a Melilla (España). Se saldó con 23 civiles muertos y casi 80 heridos, según fuentes oficiales (las organizaciones de la sociedad civil presentes en la zona elevan la cifra de muertes a 37).

El mismo día, el presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, reaccionaba ante los trágicos hechos con un reconocimiento a la buena organización, colaboración y actuación de las fuerzas armadas españolas y marroquíes.

No son esas las palabras que corresponden frente a la masacre. Aplaudía así el maltrato a las personas, tratadas como ganado. Personas africanas negras, atadas de manos, apiladas, violentadas y victimizadas. No es casual tampoco. La relación histórica de África con Europa ha girado en torno a la colonización, el expolio de sus recursos y el genocidio de su población.

Nos preguntamos si esas son las “soluciones duraderas para los problemas de irregularidad” y el trabajo para “dignificar la vida de los migrantes”. Y es que a esto aludía dos días antes, el 22 de junio, el Ministro de Migraciones, José Luis Escrivá.

Alianza por la Solidaridad manifiesta su firme rechazo a la política migratoria española mortífera y cínica al externalizar el control de fronteras.

Migrantes importan

España debería ofrecer vías legales y seguras para las personas que migran. Es el único mecanismo que verdaderamente permite evitar las muertes y los riesgos en la ruta migratoria y priorizar la dignidad, seguridad y protección de los derechos de las personas.

Rechazamos la vulneración del derecho internacional, de los derechos humanos y de dobles estándares racistas. Las medidas ofrecidas por el Gobierno y la UE hacia las personas ucranianas desplazadas por el conflicto muestran hasta qué punto todo depende, simplemente, de la voluntad política. ¡Queremos los mismos derechos para todas! Todos los derechos para todas las personas.

Exigimos una investigación judicial independiente. Tanto del lado marroquí como del español, así como a escala internacional. Imprescindible para aclarar los detalles de esta tragedia.

Instamos a las autoridades a priorizar la seguridad de las personas migrantes y refugiadas, la defensa de sus derechos humanos y a abstenerse del uso excesivo de la fuerza.

Condenamos la falta de asistencia rápida a las personas migrantes heridas. Esta falta de asistencia ha aumentado el número de víctimas. Algo que podría haberse evitado con un debido auxilio por parte de las autoridades.

Instamos a que se preste una atención sanitaria adecuada y de calidad a todas las personas hospitalizadas a raíz de esta tragedia.

Exigimos a los gobiernos implicados que participen en la identificación de cadáveres y apoyen la devolución a sus familias en los países de origen. Y que lo hagan en colaboración con las asociaciones de migrantes y los consulados correspondientes.

Instamos a la Unión Europea, los Estados y demás actores involucrados a que suspendan las políticas migratorias inhumanas derivadas de la externalización del control de fronteras.

Y pedimos a instituciones, medios y ciudadanía responsabilidad en el uso y reproducción de imágenes de cuerpos negros sin vida. Estas imágenes contribuyen a su deshumanización y revictimización.

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