Una Europa más humana
El próximo 9 de junio elegiremos a quienes nos representarán en el Parlamento Europeo durante los próximos cinco años. Esto tiene una gran importancia para nuestras sociedades y también para el resto del mundo en un escenario con múltiples desafíos.
Unos desafíos para los que será necesario intensificar el compromiso político con un cambio sistémico y coherente hacia un modelo de desarrollo en Europa diferente al que conocemos: una Europa más humana.
Este modelo debe tener en cuenta los límites de los recursos del planeta sin dejar a nadie atrás, y tiene que consolidar derechos y libertades a largo plazo. Todo esto a pesar de las violencias y los discursos de odio, negacionistas y antiderechos que estamos viendo avanzar.
Derechos humanos cuestionados
En los últimos años, hemos observado con preocupación cómo los derechos humanos en la Unión Europea están siendo cuestionados y, en muchos casos, erosionados. Las desigualdades y las crisis estructurales se están agravando, lo que hace urgente apostar por una transformación profunda del sistema actual.
La crisis ambiental nos recuerda cada día que no hay un planeta B, no hay otra Tierra a la que escapar. La crisis social se recrudecerá si no terminamos con las desigualdades entre personas ricas y pobres, hombres y mujeres, sin importar su origen, condición o a quién amen.
Si continuamos alimentando un modelo que cercena derechos y da la espalda a los cuidados, la situación solo empeorará.
Hemos visto un aumento alarmante en los discursos de odio, especialmente contra personas migrantes y racializadas. Además, las políticas migratorias se han vuelto cada vez más restrictivas, convirtiendo a Europa en una «fortaleza» que prioriza la seguridad y los intereses económicos sobre la dignidad y los derechos de las personas.
Sobre derechos humanos hemos hablado con algunas de las fuerzas políticas que concurren a estas elecciones en un debate que no te dejará indiferente. ¡Dale al play!
Un debate organizado junto a Público, Red Latinas y Turba comunicación.
Políticas europeas con consecuencias más allá de nuestras fronteras
Estas políticas tienen consecuencias devastadoras para los colectivos más vulnerabilizados: las mujeres, las personas migrantes y las minorías étnicas son quienes más sufren estas políticas injustas. La exclusión social, la discriminación y la violencia estructural se están normalizando, creando una sociedad cada vez más dividida y menos solidaria.
Es fundamental reconocer que la igualdad de género, por ejemplo, no es solo un tema aislado, sino que impacta en todos los ámbitos económicos y medioambientales.
Una Europa más humana
Necesitamos un compromiso real y perdurable: los partidos políticos y la sociedad civil deben comprometerse a defender y promover los derechos humanos en todas las políticas europeas.
Un liderazgo centrado en las personas: debemos poner en el centro a las personas y sus derechos, necesitamos un liderazgo que promueva la inclusión, el respeto y la convivencia.
Más diálogo: el avance solo llegará si fomentamos el diálogo y la colaboración entre los distintos grupos políticos para generar consensos y promover los derechos humanos.
Solo a través del trabajo conjunto y del compromiso mutuo podremos construir una Europa más justa, equitativa y solidaria, donde los derechos de todas las personas sean plenamente respetados y protegidos.
Porque no es lo mismo votes lo que votes, elige bien quién defiende los derechos humanos de TODAS las personas sin excepción y quién no.
¿Quién se llevará tu voto las próximas elecciones?