Salir de tu casa. Hacer la maleta. Despedirte de la familia. Coger un avión -en el mejor de los casos- o pagar una cantidad astronómica por un pasaje en una barca en una de las rutas migratorias más peligrosas. Llegar a un país nuevo. No conocer a nadie. Dejar atrás quién eres, para darte cuenta de que lo necesario es lo contrario. Pasarlo mal. Recuperar. Empoderarte. Tejer redes. Ser lideresa.

Cuando se juntan estas mujeres migrantes, racializadas, se produce una revolución. Un movimiento que reivindica cambios. Una fuerza que los impulsa.

Encuentro mujeres migrantes lideresas

El pasado 4 de mayo de 2024 se celebró el Foro de Mujeres Migrantes Lideresas, organizado desde el propio colectivo, en el que participaron 30 mujeres de 11 colectivas de mujeres migrantes de Almería, Cádiz, Huelva, Granada, Málaga, Sevilla y Mérida. Un encuentro que sirvió para apoyar la articulación del movimiento, así como la construcción de agendas comunes de derechos.

«Yo soy lideresa del encuentro, del disfrute y de la rebeldía»

«Yo soy lideresa en defensa de la igualdad y de los derechos laborales»

«Yo soy lideresa de mi vida»

Un liderazgo que surge como resistencia contrahegemónica frente a un poder machista, colonialista, racista y patriarcal que pone contra las cuerdas la dignidad y los derechos humanos. Por eso, las mujeres migrantes han tomado las riendas, se autoorganizan y desarrollar esas capacidades personales que han sido posibles a partir del activismo político y de la participación colectiva.

Se unen para construir una comunidad a través de los afectos y la ternura política que reconoce la diversidad de pensamientos y de cuerpos. El liderazgo implica mirar hacia dónde queremos llegar partiendo de los saberes de cada una y una realidad compartida.

Un manifiesto para cambiar la realidad de las mujeres migrantes

De todas esas reflexiones ha surgido un manifiesto para llamar la atención sobre la necesidad de asumir los compromisos legales y humanitarios del Estado Español, abordando con urgencia medidas para una política migratoria digna, estable e inclusiva. Estos compromisos atañen a todas las administraciones públicas desde lo local hasta el estatal.

Un llamamiento al papel movilizador y de incidencia de las propias organizaciones y colectivos sociales; y a la necesidad de que se abran nuevos espacios y se fortalezcan los ya existentes , para la incidencia política de las mujeres migrantes.

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