25N: Sin mujeres no hay paz
Sin mujeres no hay paz. Tenemos en la retina cómo, en el último año y medio, se han exacerbado conflictos con escaladas de violencia sin precedentes. Algunos, con estallidos recientes, como la invasión total de Ucrania por parte de Rusia, o la ofensiva israelí sobre Gaza; otros, con profundas raíces desde hace casi medio siglo, como Colombia.
Todos ellos comparten cómo la violencia hacia las mujeres se amplifica en estos contextos: junto a las y los menores, son la mayor parte de la población civil que más sufre, son objetivo de violencia sexual, se incrementan las posibilidades de sufrir violencia de género.
A pesar de ello, ellas se organizan, resisten, sobreviven y protegen. Las mujeres trabajan para evitar la violencia, para construir sociedades más justas, más solidarias y en paz. Pero son demasiadas las ocasiones en las que sus derechos y circunstancias no son tenidos en cuenta. No hay una paz verdadera si no hay mujeres sentadas a la mesa y participando en la toma de decisiones.
En todo el planeta, las mujeres se han organizado para mejorar sus condiciones de vida, transformar la desigualdad de género, incidir en los espacios políticos y contribuir a construir la paz a través de la resolución pacífica de conflictos. Las mujeres saben que la construcción de una sociedad en paz solo es posible si se hace contando con quienes se encuentran en mayor estado de vulnerabilidad.
Un año más, el 25 de noviembre, día para la erradicación de las violencias contra las mujeres, queremos reconocer también el trabajo de muchas compañeras que, con su esfuerzo, construyen la paz.
Escucha el mensaje que tres compañeras nos hacen llegar desde Ucrania, Colombia y el Territorio Palestino ocupado.