En el Día Internacional de la Mujer Afrolatina, Afrocaribeña y de la Diáspora queremos hacer un reconocimiento al liderazgo que las mujeres afrocolombianas han puesto en cada uno de los proyectos que realizamos con ellas. Sus contribuciones, compromiso, luchas y apuestas nos han ayudado a continuar con nuestro objetivo de transformar el pacífico colombiano.

A continuación, te presentamos las historias de mujeres del Cauca, Valle del Cauca, Chocó y Nariño en sus comunidades y como el amor por lo que hacen ha contribuido a cambiar su entorno, mejorar su calidad de vida y la de su territorio.

Mujeres líder-ando proyectos pecuarios

Cruz Elena Bermúdez forma parte de un proyecto de recuperación de medios de vida para la revitalización de la economía comunitaria. 

“Para cada litro de agua, se necesitan 4 gotas de cloro para desinfectar las verduras (…) Cuando los pollos tienen la pechuga roja o pelada, uno les debe prestar atención… ah y antes de traerlos uno debe revisar que estén vacunados”.

 

Pese a no poder asistir a todas las capacitaciones, Cruz Elena Bermúdez, secretaria del Consejo Comunitario y miembro de la comunidad afrocolombiana Copomá, ubicada a las orillas del río San Juan (Chocó), demuestra los conocimientos adquiridos durante más de 30 sesiones formativas en agricultura, cría de pollos y seguridad alimentaria.

Esta joven de 29 años hace parte de una de las cincuenta familias de Copomá; una comunidad, que tradicionalmente se dedicaba a la explotación de la caña de azúcar, la pesca y la caza, y que ahora ha recibido acompañamiento técnico para la construcción de infraestructuras para huertas caseras y comunitarias, así como para la cría de pollos de engorde con el objetivo de poder producir alimentos para su consumo y abastecimiento familiar.

Dentro de las ventajas que anota Cruz Elena de este proyecto es que ya no requieren desplazarse por las aguas del río San Juan hasta la población urbana más cercana, Docordó, o la capital del distrito del Valle del Cauca, Buenaventura, para comprar estos alimentos.

Pese a que no ha podido abandonar sus tareas habituales, relacionadas con el cuidado del hogar y la explotación de la caña de azúcar, Cruz Elena ha mantenido una actitud activa durante las capacitaciones y el acompañamiento técnico. También se ha implicado en la construcción y adecuación de los cinco galpones -con capacidad de 250 pollos cada una- de la comunidad y también en el cultivo agrícola, principalmente de cilantro, habichuelas y pequeñas hortalizas, como lechuga, tomate y pepino.

Mujeres líder -ando proyectos agrícolas

Claudia Patricia Perea, líder del emprendimiento de fruticultura Pulpi Fruver, en el Departamento de Nariño

“La paz se siembra, se cultiva, se cosecha”.

Es una enseñanza de que la vida no te priva si eres capaz de escuchar su grito, y, a sus 40 años, Claudia Patricia Perea puede decir que lo ha entendido. Ella lidera un emprendimiento de fruticultura, Pulpi Fruver, que opera como unidad no solo de producción de frutas, sino como centro para su transformación.

El pueblo de Tangareal del Mira, ubicado en el departamento de Nariño, ha sido uno de los epicentros poblacionales más afectados por la violencia. Esta atravesado por historias de vida como la de Claudia Patricia, un ejemplo vivo de la lucha por vivir en paz.

La recolección de fruta se convirtió en su principal sustento de vida después de la muerte del padre de sus hijas debido al conflicto armado. De esta historia de superación personal, Claudia Patricia vio una oportunidad de desarrollo económico gracias a los recursos naturales que da la tierra fértil de su región, algo que decidió transferir al resto de mujeres de la comunidad creando la iniciativa productiva Pulpi Fruver. Esta mujer emprendedora destaca la facilidad de cultivar árboles frutales en la región, lo que permite “sembrar, producir y tener un recurso digno que contribuya a la canasta familiar”, algo sustancial sobre todo para mujeres que no disponen de fincas donde cultivar.

“Todas recolectamos lo que se siembra y después lo transformamos, empaquetamos y hacemos una producción”, explica Claudia Patricia acerca de las oportunidades que ofrece este proyecto a las mujeres. La venta del producto es directa; gracias al dinero que obtienen, invierten en capital destinado a sacar adelante la próxima cosecha.

“Todas las mujeres podemos lograr lo que queremos siempre y cuando tengamos las ganas y la valentía de hacerlo”

 

Mujeres líder -ando iniciativas textiles

 

«Familiaridad, hermandad, nuevos aprendizajes y una forma de sentirse útil en la sociedad», con estas palabras describen las integrantes de la Asociación de Mujeres Confeccionistas de Buenaventura (ASOMUB).

Un proyecto productivo que han arrancado desde cero varias mujeres que han sido víctimas del conflicto armado, la violencia derivada y las dificultades económicas. Esta organización es una de las seis iniciativas socioeconómicas sostenibles que se han impulsado y fortalecido en Buenaventura en el marco del proyecto Pa’Lante Pazcífico, financiado por la Unión Europea.

Un total de 15 mujeres cabezas de hogar, pertenecientes a las 12 comunas de Buenaventura, han impulsado esta iniciativa de confección de prendas con telas africanas, que, además, de constituir una fuente de ingresos para ellas y sus familias, también es un medio para dignificarlas, autocuidarse y resistir en un contexto de violencia y conflicto.

 

Mujeres líder-ando la defensa de los DDHH

«Amo mi propio color».

Con este grito de dignidad y resistencia, Carmen entona esta canción típica de la cultura e identidad afro ante 40 mujeres reunidas con el objetivo de reflexionar y debatir en torno a la violencia basada en género (VBG). En el marco del proyecto «Comadreo por el territorio, la paz y la protección», varias mujeres del Cauca reciben capacitaciones con el fin de fortalecer sus conocimientos y empoderarse en DDHH, paz y autoprotección.

Concretamente, este círculo de mujeres, pertenecientes a la comunidad La Balsa del consejo comunitario Cuenca Cauca (Santander de Quilichao), iniciaron su primer acompañamiento técnico y formativo acerca del marco normativo de la VBG. En medio de una actividad para romper el hielo, Carmen Emilia evoca esta canción tan representativa del sentimiento afro, con sus saberes, costumbres, música y espiritualidad inconfundibles.

Mujeres líder -ando entornos protectores

Transformar espacios en entornos seguros, donde las mujeres puedan empoderarse, autorealizarse y gozar de forma efectiva de sus derechos. Con esta visión, más de 20 mujeres lideresas unidas en la Corporación de Mujeres Unidas Generadoras de Paz (REDMUPAZ) trabajan para promover una mayor participación pública de las mujeres de Buenaventura, garantizar sus derechos y brindarles herramientas para hacer frente al contexto de conflicto armado y violencia, especialmente de violencia basada en género (VBG), que viven en sus comunidades.

En el marco del proyecto Pa’Lante Pazcífico, financiado por la UE y desarrollado en colaboración con Humanidad Vigente, hemos impulsado un proceso de fortalecimiento y acompañamiento técnico a las mujeres de Redmupaz para que lideren, dinamicen e impulsen la creación de entornos protectores en sus comunidades.