En Rumanía

Rumanía es uno de los países a los que llega el mayor número de personas refugiadas desde Ucrania, más de medio millón a finales de marzo. La gran mayoría están en tránsito, es decir, se dirigen a otros lugares.

En las primeras semanas, muchos rumanos han acogido a las personas refugiadas en sus casas, en hoteles y también a través de las iglesias. Con el paso del tiempo, se detecta una bajada en esa ola de solidaridad y, además, las autoridades y las organizaciones advierten de los riesgos, puesto que muchos de estos alojamientos no están registrados y no pueden ser supervisados.

El Gobierno de Rumanía ha anunciado la puesta a disposición de 70.000 plazas para refugiados, pero el programa todavía no ha sido implementado por completo. 

Es necesario asegurar que todos los lugares donde son alojadas las personas refugiadas cumplen con los estándares de higiene, protección y seguridad. También es clave que esas personas reciban apoyo psicosocial, algo que no está garantizado en Rumanía.

Tráfico de personas

En un país como Rumanía, con importantes redes de tráfico de personas operando desde hace años, el riesgo de ser víctimas de trata es muy alto para las mujeres, niñas y niños refugiados. 

Un alto número de personas en movimiento que no conocen el lugar ni el idioma y muchas personas no identificadas ofreciendo transporte y alojamiento se convierten en una combinación ideal para estas redes de tráfico. Las autoridades han puesto en marcha mecanismos de verificación y registro y también se han registrado detenciones, pero el peligro sigue siendo alto. 

En cuanto a la protección de los niños, el sistema no está totalmente preparado para identificar y atender a los menores no acompañados, aunque existe un sistema de seguimiento en las fronteras. 

Qué hacemos

Desde Alianza-ActionAid, cooperamos con organizaciones locales implantadas en la zona para afrontar los principales retos detectados.

Herramientas contra la trata

Una de estas organizaciones es eLiberare, que lleva años trabajando contra el tráfico de personas en Rumanía. Estamos capacitando a funcionarios, voluntarios y trabajadores de otras organizaciones para que puedan detectar intentos de captación de las redes de trata y evitarlos. Hasta 360 personas recibirán una formación específica. 

Lanzamos campañas en redes sociales especialmente dirigidas a personas que huyen de Ucrania o que ya son refugiadas en Rumanía para que no caigan en los engaños de las redes de trata a través de Facebook, Instagram y otras plataformas. Y distribuimos folletos y manuales para las intervenciones directas con mujeres en riesgo 

Asistencia psicológica

En colaboración con otra organización local, Adra Romania, proporcionamos apoyo psicológico en un centro para supervivientes de violencia de género y dos centros de acogida de personas refugiadas. En estos dos últimos, instalaremos también espacios diseñados para niños y niñas.

Con LOGS, otra organización de base, colaboramos en la provisión de apoyo psicosocial y socioeducativo para madres y menores en Timisoara.

Apoyo a jóvenes refugiados

También trabajamos con la Fundación nacional para la Juventud de Rumanía ayudando a personas refugiadas a partir de 14 años. Los centros de esta organización se convertirán en espacios para ofrecer apoyo psicológico a jóvenes ucranianos, para que reciban clases de idioma, participen en actividades sociales y accedan a orientación en la búsqueda de empleo.

Con una coalición de organizaciones de la sociedad civil a través de DEIS, una asociación liderada por jóvenes, apoyamos un centro comunitario de personas refugiadas y una ventanilla única para emergencias, protección y servicios comunitarios para quienes huyen de la guerra.

Cargamentos para menores en Ucrania 

Junto a la organización rumana Expert Forum, organizamos la distribución de ayuda desde Rumanía hasta maternidades, residencias para niños y mayores en Ucrania con los materiales y alimentos que necesitan.

Y, hablando de alimentos, vía Eco Ruralis, ayudamos a pequeños granjeros ucranianos al tiempo que aseguramos la alimentación de las personas desplazadas.

Además, estamos ultimando intervenciones con otras organizaciones rumanas para atender las necesidades detectadas.