Aquí tenéis 4 ejemplos de cómo nuestro trabajo contribuye a mejorar la vida de las personas haitianas.

La lechería

Esta lechería es una de las dos que se están impulsando en el marco del convenio firmado con la AECID para el período 2010-2014. Se encuentra en la sección comunal de Pichon, perteneciente a la comuna de Belle Anse (distrito de Belle Anse). Dos son las organizaciones de mujeres que gestionan y se benefician de ella: AFAM (Asociación de Mujeres por el Avance de Mapou) compuesta por 600 mujeres y AFVP (Asociación de Mujeres por el Avance de Pichon). Esta actividad tiene como objetivo mejorar las condiciones de vida de la población del Departamento del Sureste gracias a la producción, conservación y distribución de productos lácteos.

Mientras que antes los ganaderos sólo podían vender la leche en el mercado local, ahora tienen la posibilidad de vendérsela también a la lechería. Pierre Jannelia, asociada de AFAM y trabajadora de la lechería, nos cuenta cómo cada día han de recorrer las granjas y negociar con los ganaderos la venta de la leche: en estos momentos el nivel de producción es de 2 galones (unos 7 litros) al día. No es mucho, pero se espera que aumente en el futuro. Con los beneficios obtenidos con la venta de la leche, transformada y embotellada, en tiendas y escuelas se adquieren nuevas materias primas y se pagan los sueldos de las trabajadoras, si hay excedentes se destinan al funcionamiento de las asociaciones de mujeres.

Vacunando a los animales 

Cada año, los veterinarios de CROSE, nuestra socia en esta zona de Haití, llevan a cabo una campaña de vacunación y desparasitación que llega a unos 680 ganaderos de la comuna de Grand Gosier, perteneciente al distrito de Belle Anse.

Corvington Zidor, técnico veterinario de CROSE, nos explica cómo antes de realizar esta actividad los ganaderos no se preocupaban por la salud de sus animales, pero gracias al trabajo de sensibilización ahora son conscientes de la necesidad de mantener sanos a los animales.

Una experiencia piloto : Lombricultura

En la comuna fronteriza de Anse à Pitres, distrito de Belle Anse, se ha lanzado una experiencia piloto con lombrices. La lombricultura consiste en la cría de lombrices para tratar los residuos orgánicos y producir un abono natural de gran calidad.

Jean Noelson, responsable de esta actividad pionera en la zona y enmarcada dentro del objetivo de apoyo al sector ganadero, nos cuenta cómo actualmente produce 150 sacos de 50 kilos cada mes de abono a partir de los desechos generados por los habitantes de Anse à Pitres. El objetivo de Noelson es aumentar la producción mediante una fórmula sencilla: convencer a los agricultores de canjear sus desechos orgánicos por abono. El objetivo es producir de una manera más sostenible, evitando el empleo de abonos químicos que no sólo son más caros, sino también nocivos para la salud.

Como mejorar la producción de miel 

Esta actividad se gestiona en la quinta sección comunal de Bainet, Bas Grandou (distrito de Bainet). Los apicultores de esta zona estaban acostumbrados a producir miel, una de sus principales fuentes de ingresos, a través de medios tradicionales: construían colmenas en troncos vaciados que repartían en un pequeño parterre. Etienne Chavannes, profesor de técnicas apícolas, nos cuenta cómo cada una de estas colmenas tradicionales produce en torno a un galón (aproximadamente 3,5 litros) de miel. Sin embargo, con una colmena moderna pueden multiplicar por 8 ó 9 su producción.

Estas colmenas tienen unas medidas estándar, como nos cuenta el maestro carpintero Gabriel Pierre Roger, y están fabricadas en madera. Son los propios apicultores los que fabrican las colmenas modernas gracias a las enseñanzas de Roger. En el vídeo podemos ver en qué consiste la técnica antigua que se pretende remozar: visitamos al apicultor Douger Saintamand en su parcela. El aumento de la producción de miel permitirá además la comercialización de otros productos derivados como cera, polen, etc.