Con motivo de la conmemoración del Día Mundial de la Asistencia Humanitaria que se celebró el 19 de agosto, las organizaciones humanitarias Acción Contra el Hambre (ACH), Alianza por la Solidaridad (ApS), Consejo Noruego para Refugiados (NRC, por sus siglas en inglés) y Federación Luterana Mundial (FLM), en asociación con la Iglesia Sueca, lanzaron proyectos dirigidos a atender las necesidades humanitarias de poblaciones campesinas, afrodescendientes e indígenas en los departamentos de Putumayo, Valle del Cauca, Nariño, Cauca, Norte de Santander y Chocó.

Los proyectos, financiados por la Unión Europea por un monto total de casi dos millones de euros (cerca de seis mil quinientos millones de pesos colombianos), beneficiarán a 20.045 personas en los seis departamentos y se enfocarán en brindar asistencia a las poblaciones afectadas por el conflicto armado la persistencia de necesidades básicas desatendidas en materia de agua, saneamiento e higiene, y darán acompañamiento jurídico y psicosocial a personas víctimas de la violencia.

“El objetivo de estos proyectos es que la población recupere su dignidad y mejore sus condiciones de vida”, asegura Saara Vuorensola-Barnes, representante en Colombia de la Federación Luterana Mundial, quien añade que “el trabajo de las organizaciones humanitarias no sustituye, sino que complementa la labor de las instituciones y autoridades locales, que a menudo ven desbordada su capacidad de respuesta ante una crisis humanitaria compleja y persistente”.

Las cuatro organizaciones, que emprenderán una estrategia de comunicación conjunta para visibilizar la realidad que se vive en estos territorios, enfatizan en que más allá de la firma o no de un acuerdo de paz entre el Gobierno y la guerrilla de las FARC, las poblaciones de estos departamentos, que han sido especialmente golpeadas por la violencia, siguen necesitando asistencia humanitaria, tanto en sus zonas urbanas como rurales, viéndose especialmente afectadas las comunidades más vulnerables, como las priorizadas en los proyectos.

Al mismo tiempo, insisten en que el papel de las organizaciones humanitarias internacionales constituye un aporte clave para la construcción de la paz y recuerdan que mientras siga habiendo poblaciones afectadas por el conflicto y necesidades desatendidas, será necesario continuar brindando asistencia humanitaria de calidad, aún en la etapa post-acuerdo de paz.

[pdf-embedder url=»https://www.alianzaporlasolidaridad.org/axs2020/wp-content/uploads/Presentacion-INGOs-11-11-15-V2.pdf» title=»presentacion-ingos-11-11-15-v2″]

Información general acerca de las agencias humanitarias

• El proyecto de la organización española Acción Contra el Hambre (ACH) tiene por objetivo reducir los riesgos de desprotección de la población más vulnerable afectada por el conflicto armado en el departamento de Putumayo, asegurando la satisfacción de sus necesidades básicas y su acceso a agua, saneamiento e higiene, en zonas rurales de difícil acceso a necesidades básicas, en la primera fase de la emergencia humanitaria en los lugares de recepción de población desplazada.
• El proyecto de la organización española Alianza por la Solidaridad (ApS) se dirige a suplir necesidades básicas de asistencia humanitaria en comunidades urbanas y rurales de Buenaventura (Valle del Cauca) y Tumaco (Nariño), en su mayoría afrodescendientes. También brindará orientación y acompañamiento jurídico, con el objeto de que conozcan sus derechos y la ruta de atención para acceder a ellos, y acompañamiento psicológico dirigido a personas y/o familias víctimas del conflicto, entre otras actividades.
• Por su parte, el proyecto de la organización Consejo Noruego para Refugiados (NRC) se llevará a cabo en los departamentos de Cauca y Nariño, así como en la región del Catatumbo (Norte de Santander), con el objetivo de mejorar el acceso de comunidades rurales indígenas, afrocolombianas y campesinas afectadas por el conflicto, a mecanismos de protección durante emergencias súbitas y crónicas y apoyarlas en el desarrollo de estrategias de prevención y/o mitigación de la violencia para prevenir mayor daño.
• El proyecto de la Federación Luterana Mundial, en coordinación con la Iglesia Sueca, tiene por objetivo contribuir a la protección y a la mejora de las condiciones de vida de comunidades rurales indígenas y afrodescendientes, afectadas por el conflicto armado y los desastres naturales en Bojayá (Chocó), y abogar porque las entidades gubernamentales y no gubernamentales atiendan a sus necesidades básicas insatisfechas.