La voz de las mujeres de Mozambique llega a los tribunales comunitarios

Hay una fecha marcada en el calendario de Mozambique. Un 7 de abril, de 1971, moría Josina Machel, guerrillera y heroína africana que luchó por la independencia de su país y, a la vez, por la emancipación de las mujeres de su tierra. Desde los 13 años, Josina  fue consciente de cómo la educación colonial cercenaba su cultura y las ansias de libertad de su pueblo, así que no tardó en incorporarse a la lucha por la liberación.

Con 18 años, se unió a la FRELIMO, el grupo guerrillero que luchaba contra el poder colonialista, pero la acabaron apresando, y torturando. Una campaña de presión internacional consiguió que quedara libre. En la zona liberada, puso en marcha un avanzado programa social, hasta que falleció con apenas 25 años debido a un cáncer.

Desde entonces, Josina es un símbolo de la emancipación femenina en Mozambique, uno de los países más pobres de la tierra y también un país donde el 80% mujeres producen alimentos de subsistencia, pero en el que no han tenido la voz que les  corresponde. Por ello, Alianza por la Solidaridad, que trabaja en el norte del país desde hace años, ha iniciado un trabajo con los tribunales comunitarios, en el ámbito rural, para que su presencia aumente.

El proyecto, financiado por la Agencia Española de Cooperación Internacional al Desarrollo (AECID), se ha iniciado en comunidades del municipio de Mueda, al noreste, muy cerca de la frontera con Tanzania por la que pudo haber cruzado la propia Josina… Quién sabe. Estos tribunales comunitarios no son organismos oficiales pero gozan de gran autoridad en las pequeñas aldeas, dado que de ellos forman parte las personas más influyentes, en general quienes ya tienen una edad adulta y avanzada. Bajo su responsabilidad está dirimir los conflictos y problemas que surjan en el seno de las comunidades y sus decisiones suelen ser siempre respetadas.

Sin embargo, pese a que tienen un crucial para decidir sobre infinidad de temas, algunos relacionados con violencia de género o  con bodas precoces, rara vez participan mujeres. Así ocurre en Mueda, donde la presencia femenina se limita al ámbito privado, por más que muchas familias dependen de su trabajo para subsistir.

Ahora se quiere cambiar esta situación para siempre. El primer paso para darle un vuelco está siendo el diseño, tanto por parte del personal de Alianza por la Solidaridad como de la organización local MULEIDE, de las primeras acciones de sensibilización en estos tribunales. Muchos de ellos ni siquiera tienen elegidos todos sus componentes, lo que dificulta su actividad, por lo que promover que completen sus estructuras, y a ser posible con mujeres, es un horizonte prometedor.

Un elemento a destacar de cara a conseguirlo es la especial importancia que tiene la presencia de  mujeres para la resolución de conflictos, estén ellas implicadas o no lo estén, como se ha demostrado en tantos lugares y momentos de la historia.

Proyectos como el que Alianza está poniendo en marcha en ese rincón de África estos días, son fundamentales para que las mozambiqueñas obtengan el empoderamiento con el que Josina Machel soñaba ya hace medio siglo.

0 comentarios

Dejar un comentario

¿Quieres unirte a la conversación?
Siéntete libre de contribuir!

Deja una respuesta